Me ha encantado esta sesión de pre-boda de esta pareja en un supermercado. Una muestra de que hacer una sesión de bodas o casarse no tiene por qué salir por un ojo de la cara y no tiene por qué ser siempre lo mismo.
Retratan escenas cotidianas como leyendo, hacer la compra, limpiar, o «estamos pelados», de una manera divertida.
Os habéis fijado que él lleva las zapatillas verdes a juego con el vestido de ellas? Me encantan este tipo de detalles sutiles pero que dotan a las imágenes de gran personalidad.
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